Cuarto Chakra Anahata (Intacto)

El del Corazón, o Cardiaco, Anahata (Indemne) 

Es desde nuestro corazón desde donde manifestamos el amor y la compasión.

A través de él fluye la energía humana y universal que nos conecta con todas las formas de vida. Nos amamos a nosotros mismos y por tanto amamos y comprendemos a otras personas, considerándolas apoyos para nuestro aprendizaje en la vida.

En él reside nuestro espíritu, nuestro verdadero ser

• Elemento: Aire
• Planeta: Venus
• Su color: Verde con mezcla de tonos rojos
• Columna dorsal entre omóplatos (entre mamilas). 
• Loto de doce pétalos. 
• Verde 
• Glándula: timo
• Energía de la vida: capacidad de amar
• Desarrollo: 21 a 28 años 

Amor – Servicio

Situado a la altura de la séptima vértebra dorsal, entre los omóplatos.

El centro cardíaco es el asiento de la energía de la vida que, según las antiguas tradiciones, viene de un plano superior de la conciencia, la esencia divina.

La glándula correspondiente a este chakra es el timo, implicada en las reacciones de inmunidad, muy desarrollada en el niño pequeño. Al igual que la epífisis sufre cambios involutivos.

Desempeña un papel importante en las funciones de auto reconocimiento, por lo que es clave, junto con el chakra solar, en el tratamiento de los problemas auto inmunes.

Si este chakra se despierta correctamente, tiene poderes transformadores, magnéticos y radiantes, a través de él se difunde al amor de Dios.

Cuando se halla sobreactivo produce un individuo amoral e irresponsable.

Todas las enfermedades del corazón, el sistema circulatorio y la sangre, pueden ser tratadas de modo efectivo a través de este chakra.

El ascenso de la conciencia del tercero al cuarto chakra, atravesando la barrera del músculo diafragmático, que separa el abdomen del tórax, representa una transmutación del nivel de conciencia animal al de conciencia propiamente humana, caracterizado por el desarrollo de la solidaridad y la conciencia grupal.